Desde octubre pasado está a la venta 14 sucursales de la cadena de restaurantes TOK el café orgánico de Tacaná

Este café es producido en la reserva de la biósfera del Volcán Tacaná en Chiapas por un grupo de 140 pequeños productores de diferentes comunidades, quienes en 2016 se unieron para crear “Productores Orgánicos del Tacaná”. Esta sociedad rural se ha encargado de producir café orgánico de altura y de la más alta calidad mediante técnicas que cuidan el medio ambiente bajo la batuta de José Verdugo, líder de este proyecto cafetalero.

“En Restaurantes Toks, a través del programa de Proyectos Productivos, iniciado en 2003, buscamos integrar en la cadena de valor productos naturales, artesanales, sin conservadores ni saborizantes artificiales, comercializados bajo un esquema de comercio justo, incluyente y socialmente responsable. Para el proyecto del café orgánico, esperamos incrementar al menos cinco veces el ingreso de los productores y erradicar la pobreza en las comunidades”, destacó Gustavo Pérez Berlanga, director del área de responsabilidad social de Grupo Toks.

El directivo presentó a finales de Marzo pasado, en un webinar que moderó Edgar López Pimentel, Director de ExpoK y al que asistió Restaurantes Sostenibles, el proyecto “Rompiendo las barreras hacia la transformación climáticamente inteligente de paisajes de café y cacao en México”, el cual se llevará a cabo gracias a la alianza entre Grupo Gigante, Rainforest Alliance y Sustainable Agriculture Food Environment (SAFE), encaminada a unir esfuerzos para apoyar a los cafetaleros de la zona chiapaneca, quienes enfrentan grandes problemas y retos derivados de los efectos del cambio climático. Este proyecto busca aumentar la resiliencia al cambio climático, la producción y la rentabilidad de las parcelas de los agricultores, permitiéndoles generar un mejor ingreso y acceder a mejores oportunidades de vida.

Dicho proyecto se basa en la llamada Agricultura Climáticamente Inteligente (CSA, por sus siglas en inglés), la cual busca ofrecer una solución a la problemática del cambio climático que padecen los agricultores. Los métodos de la CSA se orientan a reducir la vulnerabilidad al cambio climático, aumentar la resiliencia de las parcelas y el ecosistema a través de la restauración del paisaje, diversificar la producción y reducir las emisiones de carbono mediante la aplicación de nuevas tecnologías, contribuyendo también a la seguridad alimentaria y las metas de desarrollo sostenible.

“Para Rainforest Alliance México, resulta gratificante unirse a empresas mexicanas como Grupo Toks que comparten nuestra visión, en la que las alianzas entre los negocios y el manejo sostenible de los recursos naturales son la piedra angular para proteger la integridad de sus colaboradores y el medio ambiente”, mencionó Édgar González Godoy, director general de Rainforest Alliance México.