Pocos podían suponer que, en el mundo de los restaurantes, además de conocer sobre el precio del rodaballo habría que hacerlo sobre el del R404A. Pues bien, dada la dinámica normativa de los gases fluorados, en el marco de la UE, los equipos de frío deben ser auditados según los gases que utilizan y si son contaminantes o no.

Desde el 1 de enero ya rige la tasa aplicable a todos los GES cuyo GWP supera los 150 puntos (1 punto de GWP vale 0,002euros), lo cual ha supuesto una revolución en materia de sustitución de fluidos que poseen alto GWP y por supuesto encontrarse la inspección con declaraciones inciertas, respecto a los gases que se usan en los equipos.

El sector de instaladoras de frío y climatización, está cumpliendo un estratégico papel en la transición legal, prestando un importante servicio a los afectados, asumiendo el rol de integradores de soluciones termodinámicas. 

En este orden de consideraciones, es noticia el pacto de cooperación entre la empresa española Asofrío (central de compras) y la francesa Gasel (103 miembros) con el fin de compartir proveedores y soluciones comunes para sus clientes.