El chef Albert Mendiola, del restaurante Marimorena (Sant Boi de Llobregat), fue proclamado Cuiner de l'Any 2017, tras superar en la votación popular al resto de los cinco finalistas, seleccionados por un jurado de expertos profesionales. El premio fue concedido por el Fòrum Gastronòmic de Girona, celebrado en noviembre pasado, en una gala donde los aspirantes tuvieron que demostrar en directo porqué merecían ser candidatos a este prestigioso galardón, que reconoce la labor de cocineros emergentes.

Albert Mendiola y Patricia Torres

Mendiola defendió su candidatura con uno de sus platos estrella, un huevo a la romana, elaborado con huevos de corral de Sant Boi, calamarcitos de Vilanova, cebolla caramelizada y alcachofa de Sant Boi en tres texturas (a la brasa, cruda y salteada).

El chef ha agradecido a todos el apoyo recibido en los últimos días, tanto a los que le han votado, así como a su equipo y a su pareja y jefa de sala de Marimorena, Patricia Torres. El chef, muy emocionado, segura que "este premio es todo un honor y un reconocimiento a mi trabajo y al de mi equipo, y me comprometo a seguir trabajando con la misma pasión y sensibilidad por el producto de proximidad".

Discípulo de Berasategui, Albert Mendiola (1977) practica una cocina técnica y depurada, basada en los productos del Parc Agrari del Baix Llobregat, y al alcance de todos los bolsillos. Fundado en 2012 junto a su pareja Patricia Torres, la carta de Marimorena consigue un excepcional equilibrio donde los productos de proximidad, de temporada y de calidad deslumbran en platos creativos, pero entendibles, no en vano, su mirada siempre está en la cocina tradicional. “Mi cocina es la cocina de la abuela, con la mirada del nieto”, confiesa.

La apuesta de Albert Mendiola por los productos de su entorno (la gran mayoría de ellos ecológicos) va más allá de una carta de presentación, es toda una filosofía. No concibe su cocina sin materias primas escogidas personalmente entre la gran oferta que los productores vecinos le ponen sobre la mesa. La ubicación de su restaurante en el corazón del Parc Agrari del Baix Llobregat es toda una suerte, puesto que le permite tener al alcance productos sencillos, pero de una calidad extraordinaria, como las manzanas y las alcachofas de Sant Boi, el cabrito lechal de Sant Ramón, el espárrago de Gavà, las cerezas de Torrelles, el pollo de Pota Blava…

Allbert Mendiola empezó en la cocina con solo 16 años. Su vocación le llevó a la Escola Joviat, pero mientras tanto no dejó de realizar prácticas, lo que le permitió formarse más allá de las aulas. Coincidió con Xavi Franco (Les Magnòlies) en un restaurante de Passeig de Gràcia, trabajó en Tragaluz, y recorrió diversas cocinas de establecimientos de la Cataluña rural. Pero su afán de conocimiento y sus ganas de aprender le impulsaron a coger su mochila y a presentarse en la puerta del restaurante de Martín Berasategui en Lasarte. ¡Quién le iba a decir que esa locura de juventud le llevaría a convertirse en Jefe de Cocina del Kursaal con solo 22 años! Tras su paso por las cocinas laureadas del chef vasco, Mendiola regresó a Barcelona y ya en su tierra natal volvió a vincularse al Grupo Tragaluz, esta vez en Negro, donde conoció a Patricia, una compañera que le hizo cambiar de rumbo.

Después de varias aventuras en diversos establecimientos (como el Bar Mut de Barcelona), Albert abre en 2012 Marimorena, su proyecto personal, ubicado en su ciudad natal, donde regresa con placer, y donde descubre que la cocina técnica, evolutiva y de calidad también puede realizarse fuera de las grandes ciudades. Poco a poco, su pequeño sueño se va haciendo grande y en 2015 cambian de local para vestir a Marimorena más confortable, más elegante, y convertirla en un establecimiento perfecto para seducir a través del paladar. Entre sus platos estrella, el carpaccio de huevos fritos con gambas y piñones; el fricandó de berenjenas, el atún Balfegó ahumado con higos; o el milhojas de manzana de Sant Boi con Txangurro.

En el pasado otoño Mendiola ha emprendido un viaje con nuevos compañeros: se asoció con Grup Diversus para la creación de una nueva marca que dotará de mayor calidad y del sello inconfundible de Mendiola a los establecimientos del conocido grupo santboiano. La idea es sumar la fuerza laboral y experiencia en la gestión del Grup Diversus y la maestría, creatividad y artesanía de Albert Mendiola. La nueva marca aglutina diversos servicios de restauración desde restaurantes con ofertas culinarias diferenciadas, hasta un catering, un centro de I+D y de formación, y mucho más.