Si hay un grupo de restauración que demuestra cintura en el terreno de la sostenibilidad esa es la compañía de los arcos de oro. Y para muestra, su nuevo local  en el barrio de River North de Chicago, abierto este mes de agosto, donde ha sustituido la temática de la música rock por la de la sostenibilidad, tanto a nivel energético (placas solares) como hidropónico (sus paredes están plagadas de jardines colgantes) sin menos cabo de una decoración en la que priva el respeto al cliente y sus preferencias sobre la sostenibilidad en los restaurantes.

Un jardín de vidrio flotante de helechos y abedules blancos acompaña  a más de 70 árboles y arbustos que recubren las paredes interiores y más de mil paneles solares sobre el techo. El nuevo McDonald’s es irreconocible para aquellos que recuerdan la esquina de Clark y Ontario como el hogar del icónico Rock-N-Roll McDonald’s, un hito en Chicago desde 1983 que encapsuló los felices recuerdos de la infancia de muchos habitantes de la ciudad. El restaurante ahora está lleno de quioscos con pantalla táctil en los que los clientes pueden ordenar su comida, una zona independiente de McCafé y grandes ventanas.

El nuevo River North McDonald’s incluye algunos de los elementos de diseño futurista que forman parte de la iniciativa “Experiencia del futuro” de la compañía con sede en Chicago. Según Easterbrook, la empresa planea modernizar la mayoría de sus 14 mil ubicaciones de McDonald’s en los Estados Unidos para 2020.