Aínsa se transformó los días 21 y 22 de mayo en el epicentro del turismo sostenible internacional con la celebración de la quinta edición de los Premios Edelweiss. Organizados por el Clúster de Turismo Sostenible de Aragón y el Ayuntamiento de Aínsa, estos galardones tienen como misión principal impulsar modelos turísticos respetuosos con el entorno y reconocer las mejores iniciativas, tanto locales como nacionales e internacionales, que estén ayudando a forjar un futuro más responsable para el sector.

Más de 70 entidades presentaron sus candidaturas en diez categorías, que abarcan desde alojamientos turísticos (más y menos de 25 habitaciones) y proyectos inspiradores (a nivel autonómico, nacional e internacional), hasta distinciones en enogastronomía, territorio sostenible, arquitectura respetuosa y el compromiso de ONGs y fundaciones. Cada una de estas categorías premia iniciativas que ponen en valor el patrimonio natural y cultural de Aragón, promueven la innovación social y refuerzan el potencial de la comunidad local.

A lo largo de la ceremonia, cerca de 200 participantes pudieron disfrutar de un programa que combinó aventura, talleres de promoción turística y actividades de gastronomía local, demostrando en la práctica cómo la región de los Pirineos oscenses es un laboratorio vivo de sostenibilidad. Estas jornadas de trabajo y encuentro no solo visibilizaron proyectos ejemplares, sino que también ofrecieron un espacio para el intercambio de ideas y la construcción de alianzas duraderas entre empresas, administraciones y entidades sin ánimo de lucro.

Para la Fundación Restaurantes Sostenibles fue un honor participar de este evento. Nuestra presidenta de honor, Nita Macià, fundadora del Clúster, invitó a Sergio Gil, presidente de la Fundación, a formar parte del jurado y a acompañar la entrega de premios. Su presencia refrendó el compromiso de la Fundación con los ejes de sostenibilidad: producto, planeta, personas y patrimonio.

Los Premios Edelweiss vuelven así a reivindicar que un turismo responsable no solo es posible, sino deseable: construye economías locales más fuertes, preserva el medio ambiente y ofrece a viajeros experiencias auténticas y de valor. Con esta quinta edición, Aragón consolida su papel como destino pionero en sostenibilidad y marca el rumbo a seguir para que cada rincón del territorio funcione como un punto de encuentro entre la cultura, la naturaleza y la innovación.